EL BELGA (4)
Traducción
del libro Canary book de R.L. Wallace, publicado en 1875.
Este
libro nos da una visión histórica del Bossu Belga, de los métodos de cría de
entonces, de su valoración, etc. Espero que sea de interés para los aficionados
EMPEZANDO
A ENTRENAR. HABITUÁNDOLES A LA JAULA.
Cuando
los pájaros llegan a la edad de siete u ocho semanas se debe comenzar a
entrenarlos para estar en la jaula, es decir, enseñarles a entrar y salir de
sus jaulas habituales de concurso. Este procedimiento se realiza habitualmente
en Bélgica ya que cogerlos con la mano para introducirlos en sus jaulas es una
práctica censurable porque asusta y atemoriza a los canarios. Este
entrenamiento es fácil de hacer, y se debe realizar de la siguiente manera: se
pone la jaula de concurso enfrente de en la que está el canario, con las dos
puertas abiertas una frente a otra y se empuja suavemente con un palo, sin
brusquedades, para que el canario entre en su nueva jaula. Si el canario es muy
nervioso lo mejor es dejar las dos jaulas juntas durante un par de días para
que el canario pase libremente de una a otra y se habitúe a la jaula de
concurso. También se puede recurrir a poner en la jaula de concurso alguna
comida que les guste mucho a los canarios: huevo cocido, verdura o fruta, para
que así se habitúen a entrar y a estar en su nueva jaula. La ventaja de todo
este procedimiento es que una vez que el canario lo ha aprendido ya no lo
olvida. En pocas semanas los canarios estarán habituados a entrar y salir de
las jaulas.
Habituar
a los canarios a estar en la jaula de concurso supone una gran ventaja durante
los mismos, ya que así podrán mostrar mejor su posición de una manera
tranquila.
ENTRENÁNDOLES
PARA TOMAR LA POSICIÓN.
Tan
pronto como se descubra que tenemos canarios belgas competentes para participar
en un concurso se debe proceder a entrenarle para que tome la posición adecuada
sin agotarse. Esto se puede hacer de varias maneras, y la que se elija depende
en gran medida del temperamento y disposición del ave. Si es un ejemplar
nervioso o tímido, hay que tener mucho cuidado y prestar atención y el máximo
de vigilancia, sobre todo al comienzo; hay que abordarlo con mucha cautela y de
una forma muy pausada, hablarle de forma suave pues las aves son capaces de
apreciar las palabras cariñosas y de esta manera adquieren más fácilmente
confianza.
Tan
pronto como el canario esté habituado a la presencia del criador, levantar la
jaula y moverla de una manera tranquila, tan pronto como el canario está
familiarizado con esta “manipulación” mover la jaula con mayor libertad. Raspar
con las uñas de los dedos la parte inferior de la jaula, de una manera no
demasiado áspera; el ruido atraerá su atención y al instante tomará su
posición; si no ocurre así o el canario parece demasiado inquieto, se puede
mover el doble fondo (bandeja) suavemente de un lado a otro, primero lentamente
y después más rápidamente.
En
cuanto el canario esté habituado a este procedimiento, es posible introducir
una varita con el propósito de acostumbrarle a tomar una posición lo más
correcta posible. Se introduce el palito por la parte trasera y con el máximo
cuidado se coloca debajo del posadero en el que está el canario; se mueve el
palito hasta que quede frente al canario y se procede a moverlo lentamente y en
silencio, si el canario no se asusta comenzará a tomar posición, levantando los
hombros y bajando su cabeza y estirará sus piernas al máximo de sus
posibilidades. Esto es lo que el criador desea que haga, pero si se continúa
demasiado tiempo probablemente deje de tomar la posición de repente, en cuyo
caso la varita debe ser retirada de inmediato, y al cabo de unos minutos introducirla de nuevo siguiendo otra vez el
mismo procedimiento; continuar con esta práctica durante diez minutos o un cuarto de hora, no menos de una vez a la
semana y no más de tres o cuatro veces como máximo, ya que si no le será muy
familiar y no producirá ningún resultado. Cuando el canario es tímido o
inseguro en sus movimientos es un buen plan colocar la jaula contra una pared.
A veces es necesario pasar la varita de una manera rápida debajo de la jaula,
lo que permite que sobresalga de repente frente o al lado del ave, pero esto
solo es necesario cuando el canario es muy nervioso. La experiencia nos dice
que este proceso es necesario si queremos que nuestros canarios muestren todas
sus cualidades y puedan ser adecuadamente enjuiciados y valorados.